Cuando pensamos en hacer un viaje solemos centrarnos más en lo que haremos que en el destino. Bien sea porque el motivo de viaje es trabajo, en cuyo caso nos preocupan las tareas a realizar, o bien porque salimos de vacaciones y lo que deseamos es descansar y disfrutar al máximo. Pero ninguna de las dos cosas debería permitir que olvidemos algunos asuntos que debemos tratar antes de viajar. Estas son tres de esas cosas que siempre debes tener en mente mientras estás preparando un viaje.
1.- Las listas son tus mejores amigas
Una buena lista, preparada con tiempo, puede servirte para más de una ocasión. Abre un documento en tu ordenador o escríbela en tu cuaderno de notas favorito, pero tenla siempre a mano. Porque, por muy bien que funcione nuestra cabeza, la excitación antes de viajar es traicionera. Esta es una lista de listas. Escoge las que mejor te vengan y llénala con el contenido que mejor se adapte a ti.
- Ropa que llevarás en la maleta
- Medicinas imprescindibles (comprobando que se permite su entrada en el país de destino)
- Documentación necesaria: billetes de avión, pasaportes y todos aquellos sin los que no viajarías
- Accesorios: gorros, gafas de sol, bikinis… No son ropa y por eso se suelen olvidar
- Productos de higiene. ¿Hay algo más incómodo que descubrir que no llevas cepillo de dientes?
2.- Comprobar las condiciones de salud del país de destino
Hoy en día encontrarás baños limpios, agua corriente inocua e instalaciones adecuadas en casi cualquier destino vacacional. De todos modos, es buena idea hacer una comprobación antes de viajar. Así sabrás si puedes beber agua del grifo o si necesitas ponerte alguna vacuna.
Si bien las listas puedes hacerlas en cualquier momento, las comprobaciones de salud tendrías que llevarlas a cabo con cierta antelación. Sobre todo para cumplir con los plazos de las vacunas en caso de que sean necesarias.
3.- Contratar un seguro de viaje
Toda precaución es poca. Todos los viajes están destinados a salir bien y a transcurrir sin problemas. Sin embargo, no tenemos el control de todo lo que pasa a nuestro alrededor. Los accidentes existen, las incidencias con compañías aéreas o de otro tipo de transporte tampoco son extrañas. Y no hay nada tan capaz de arruinar un maravilloso viaje que un imprevisto.
El problema de los imprevistos es precisamente ese: no se pueden predecir. Por eso los seguros de viaje nos permiten viajar en calma, sabiendo que cualquier incidencia estará cubierta. De hecho, el mejor seguro de viaje es el que es capaz de anticiparse al mayor número de incidencias posible. Aunque todos deseamos que ninguna de estas cosas suceda nunca, lo mejor es estar preparado por si necesitas asistencia sanitaria, por ejemplo. Comprueba aquí nuestras coberturas y viaja seguro.
