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Los síntomas de la obesidad y cómo prevenirlos

Los síntomas de la obesidad y cómo prevenirlos

Los datos sobre la influencia de la obesidad que ofrece la OMS son inequívocos. Esta enfermedad, según el organismo internacional, se ha triplicado en todo el mundo desde el año 1975. Por tanto, hay que estar atentos a los síntomas de la obesidad para hacer frente a esta lacra que arruina la vida de muchas personas, y es la causa de muchos problemas de salud. De hecho, los expertos coinciden en afirmar que tanto la dieta como el ejercicio físico son elementos clave para combatir la obesidad.

¿Cuáles son los síntomas de la obesidad?

Los síntomas menos graves de la obesidad se relacionan con la falta de movilidad o la disminución de la capacidad para realizar tareas cotidianas. Por ejemplo, sentir fatiga al subir una escalera, o transportar un objeto pesado. En este sentido, la sudoración puede causar problemas cutáneos como el intertrigo.

Sin embargo, hay otras afecciones ligadas a la obesidad mucho más serias, como las enfermedades cardiovasculares y, entre ellas, la angina de pecho. También está vinculada a la tensión arterial alta o los dolores en las articulaciones, potenciando que se resientan, e incluso pudiendo degenerar en artrosis. Además, se relaciona al sobrepeso con un mayor riesgo de sufrir ataques de gota e, incluso, algún tipo de cáncer.

Por tanto, hay que estar alerta para evitar que nuestra salud se vea afectada por el sobrepeso o la obesidad. Para ello, hay que ponerse manos a la obra: se ha de empezar por tomar conciencia de los graves riesgos para la salud que ello implica. Si te encuentras en esta tesitura, lo mejor es que acudas a un especialista para que pueda asesorarte en el diseño de una dieta y te aconseje sobre el tipo de actividad física que te ayude a solucionar tu problema con el exceso de grasa corporal.

Por otra parte, en los casos en los que la obesidad es extrema, como en situaciones de obesidad mórbida, se pueden presentar problemas relacionados con la dificultad para respirar, incluso cuando no se realiza ninguna actividad física. Así como sufrir diabetes mellitus e, incluso, el síndrome de la apnea del sueño.

Soluciones

En los casos más extremos, se puede solucionar con cirugía y/o fármacos, y también hay especialistas que recomiendan recibir atención psicológica para hacer frente al proceso de recuperación. Esto último, mientras se asume un cambio en el estilo de vida que, reiteramos, pasa por aumentar la actividad física y seguir una dieta sana y equilibrada.

Esperamos que este contenido sea de tu interés. No dudes en visitar nuestra página web, donde encontrarás todas las alternativas que ponemos a tu alcance y al de los tuyos para cuidar de vuestro bienestar y vuestra salud.

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