4 pasos para cambiar las tuberías | ¿Es posible hacerlo sin obras?

cambiar las tuberías

Remodelar la casa porque haya instalaciones que se hayan quedado obsoletas no siempre implica grandes obras. Podemos realizar pequeñas reparaciones y sustituciones por nosotros mismos sin falta de llevar a cabo una reforma. Hoy te hablamos de cómo cambiar las tuberías y qué pasos debes seguir para hacerlo tú mismo en casa.

Hay diferentes tipos de tuberías, pero en las casas más antiguas todavía podemos encontrar tuberías de plomo, muy perjudiciales para la salud. En este caso deberíamos cambiarlas de inmediato, si acabamos de mudarnos. Puede que una sustitución total de la instalación conlleve una obra y que llames a un profesional. Pero otra razón para cambiar las tuberías simplemente es que las de plástico o cobre (las más habituales actualmente) se hayan deteriorado por el tiempo. Podemos localizar las tuberías que están estropeadas y sustituirlas por otras nuevas en pocos pasos.

4 pasos para cambiar las tuberías en casa

Cerrar la llave general

Lo primero que debemos hacer es cortar el suministro de agua en la llave general.Después podemos abrir el grifo para que salga el agua que se haya quedado en las tuberías y evitar que al retirarlas salga agua.

Localizar las tuberías a sustituir

Echar un vistazo a la instalación en general para saber qué zonas queremos sustituir o si queremos sustituir un tramo entero de tuberías. En realidad, esto debemos hacerlo antes, para comprar la longitud de tubería que necesitaremos sustituir. Las tuberías de polietileno son unas de las más utilizadas actualmente y pueden ser la opción perfecta si necesitamos cambiar un tramo entero de tuberías.

Cortar si es necesario y unir las tuberías

Retiramos las tuberías y las sustituimos por las nuevas. Para esto necesitarás cortar los trozos de tubería con una tijera especial para tubos. En caso de tener que unir varios tramos podemos usar pegamento especial, pero no antes de limpiar las nuevas tuberías y los extremos que no sustituiremos por dentro y por fuera.

Las tuberías no se enroscan. En el caso de que sea necesario las uniremos a las válvulas o a los codos que se encuentren en el tramo.

Abrir la llave y comprobar

Una vez hayamos acabado de sustituir las tuberías, abrimos la llave de paso y comprobamos que hayamos hecho bien el trabajo. Abrir el agua muy despacio para ver si hay fugas en las juntas de las tuberías y en el tramo que hayamos sustituido.

Si tienes que sustituir todas las tuberías de la casa debido a que se han quedado obsoletas o son de plomo, te recomendamos que contactes con un profesional. Consulta si tu póliza de seguro cubre este tipo de obras; en muchos casos pueden contar con un profesional que se ocupe del trabajo.

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Obras y seguro de hogar | ¿En que afectan las obras a mi seguro?

obras y seguro de hogar

Actualmente, cada vez se compran más casas de segunda mano y menos de obra nueva. Esto conlleva un incremento de las reformas en casa para adaptarla a las necesidades y gustos de los nuevos propietarios. Hoy te hablamos detenidamente sobre las obras y el seguro de hogar, cómo afectan y qué coberturas existen.

Las obras que se llevan a cabo en casa pueden ser derivadas de adaptar la vivienda para vivir cómodamente, porque haya que llevar a cabo reparaciones necesarias. Pero también está la opción de llevar a cabo una reforma porque queramos cambiar o añadir elementos en la casa. En función de la intención de las obras, el seguro tendrá cobertura o no.

Cómo afectan las obras a mi seguro

Si las obras que estamos haciendo en casa se deben a un siniestro, un accidente como un incendio, una inundación o un derrumbe, y esta reforma sirve para reparar la casa y hacerla de nuevo habitable, estarán cubiertas por el seguro de hogar.

Este tipo de seguro es el que cubre el continente, que cubrirá los daños que sufra la estructura de la casa y los elementos que la componen. También referente a las tuberías y los sistemas de calefacción o climatización de la casa. En este caso el seguro se hará cargo de los gastos de las obras, pues son consecuencia de los daños que se han ocasionado en el continente.

Sin embargo, para las obras que realizamos en casa y que son decisión nuestra para mejorar, añadir o quitar algún elemento o estructura, los gastos corren por nuestra cuenta. De todas formas, aunque sea nuestra decisión reformar una habitación, sea porque queremos cambiar algo o por el simple desgaste de la vivienda, y el seguro no corra con los gastos, existen algunas obras de mantenimiento que sí pueden estar incluidas en la póliza.

El seguro cubre las reformas necesarias, no las voluntarias

Las mejoras voluntarias de cualquier parte de la casa correrán a nuestra costa, pero si queremos hacer obras en el tejado solo porque creemos conveniente cambiarlo antes de que pueda deteriorarse más y causar problemas mayores a la casa, debemos consultar con el seguro. En algunos de estos casos, la póliza cubre este tipo de obras.

Si nuestro seguro no cubre las reformas que llevamos a cabo de forma voluntaria, debemos hacerlas por nuestra cuenta. Para esto hay que asegurarse de que el contratista que va a hacer la obra tenga contratado un seguro de responsabilidad civil que cubra los daños que pudiera ocasionar la realización de la reforma.

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