La contaminación medioambiental por CO2 se debe principalmente a las emisiones de los vehículos; sobre todo a las de los coches. Un aspecto que repercute de forma negativa en el aire que se respira en las ciudades. ¿Conoces cuál es la calidad del aire en Andorra?
La contaminación por CO2 en cifras
De acuerdo con los últimos informes de la Unión Europea, las emisiones con respecto a años anteriores se han elevado. Mientras que la industria, la ganadería o la pesca e incluso los hogares han logrado reducirlas, en el transporte no deja de incrementarse.
Así, el transporte representa más del 30% de las emisiones de CO2 que se emiten en la UE. Dentro de este, un 72% es proveniente del transporte por carretera. Una cifra desorbitada ante la que ya se han tomado medidas para que descienda antes de 2050.
Sin embargo, dado que cada vez son más las personas que adquieren un vehículo para desplazarse, resulta complejo poder controlar dichas emisiones. El problema principal, además de la evidente contaminación medioambiental, es que afecta a la calidad del aire en Andorra y demás países miembros.
La eficiencia que presenta el combustible avanza con demasiada lentitud. Por otra parte, la mala reputación que han adquirido los vehículos diésel han hecho que las ventas de estos desciendan. No obstante, los coches modernos se consideran un medio de transporte limpio. El problema reside en que la media de pasajeros es de 1,7. Si los vehículos se compartiesen o se optase por el transporte público, las emisiones descenderían considerablemente.
Y qué hay de la calidad del aire en Andorra
Las subvenciones públicas y los incentivos fiscales que hay en el país para la compra de vehículos eléctricos han convertido a Andorra en el tercer país de la Unión Europea con mayor número de aquellos. Se sitúa por detrás de Noruega y Holanda, con un 23% y un 10% respectivamente de vehículos eléctricos.
La cifra en Andorra es bastante más baja, ya que se encuentra alrededor del 5%. Aún así, se trata de una cifra elevada si se compara con la de países vecinos como Francia o España. Una práctica que, además de beneficiar a los bolsillos de sus propietarios, también afecta a la calidad del aire en Andorra.
En 2018, el Ministerio de Medio Ambiente elaboró un estudio en el que quedaba patente que la calidad del aire en Andorra era excelente o buena en más del 90% del tiempo. Esta cifra revela que los niveles de contaminación medioambiental han descendido desde 2006.
De acuerdo con el mismo informe, el tráfico es el factor principal responsable de la mala calidad del aire en Andorra o en cualquier otro país. Pero debido a los incentivos que existen en el país para potenciar la venta de vehículos eléctricos, así como una concienciación más elevada al respecto, la calidad del aire en Andorra puede presumir de ser de las mejores en Europa.
