¿Qué hacer para curar un esguince de tobillo? 5 consejos

esguince de tobillo

Se produce un esguince de tobillo cuando nos lesionamos los ligamentos que rodean a la articulación. Estas fibras son muy fuertes y son las que sostienen los huesos de la zona. Cuando pisamos mal y las forzamos, se produce el esguince. Este puede ser más o menos grave. En el peor de los casos incluso puede haber rotura de ligamentos. Pero nosotros hablaremos de los esguinces simples de tobillo. Sigue estos cuatro consejos para que la recuperación sea más rápida y definitiva.

Tratamiento del esguince de tobillo

Como en la mayor parte de las lesiones corporales, el tratamiento de la que nos ocupa; es decir, del esguince de tobillo, depende de la gravedad que presente. El objetivo del tratamiento y de los consejos que desgranamos a continuación es:

  • Reducir la inflamación y el dolor
  • Favorecer que el ligamento se cure
  • Recuperar el buen funcionamiento del tobillo para recuperar la vida normal.

El tratamiento se puede llevar a cabo en el propio hogar salvo en el caso de lesiones graves, como la ruptura de ligamentos, que requerirán un especialista en lesiones musculoesqueléticas. También es posible que debas acudir a un fisioterapeuta cuando la curación del esguince ya esté avanzada. El objetivo será recuperar el movimiento sin peligro de que vulvas a lesionarte.

5 consejos para cuidar y curar un esguince de tobillo

Será tu médico el que te indique durante cuánto tiempo debes seguir estas medidas. Su duración dependerá de la gravedad del esguince. La mayoría de nosotros tendemos a perder la paciencia cuando dejamos de notar dolor agudo. Sin embargo, debes seguir tomando estas precauciones hasta el final para evitar recaídas.

Reposo

Para que los ligamentos se recuperen vas a tener que dejar de usarlos, lo que supone no realizar ninguna actividad que te provoque dolor o incluso molestias. Tendrá que pasar mucho tiempo sentado.

Aplicar frío

Sobre todo al principio del tratamiento, es bueno que apliques frío en la zona cada dos o tres horas. Coloca una compresa de hielo durante un cuarto de hora o veinte minutos. Si tienes problemas de circulación, diabetes o alguna otra condición que haga poco adecuada la aplicación del frío, habla con tu médico.

Comprimir la zona

Usa una venda elástica para aplicar compresión al esguince de tobillo. Así ayudarás a que la inflamación desaparezca más rápido. Ten cuidado con la cantidad de presión. Quieres comprimir la zona, pero no dificultar la circulación de la sangre, lo cual podría resultar contraproducente.

Mantener la pierna elevada

Elevar la pierna por encima de la cabeza cuando estás tumbado, sobre todo de noche, ayuda a drenar el exceso de líquido y por tanto ayuda a reducir la inflamación. Mientras estés sentado, mantener la pierna en horizontal, en un reposapiés o en alguna superficie más alta que el suelo también ayuda.

Uso de muletas

Lo ideal es que no te muevas, pero si tienes que hacerlo, usa muletas y procura no apoyar el pie lesionado. El sobre esfuerzo hará que el esguince de tobillo cure más despacio.

Recuerda que en Assegur contamos con pólizas de salud para ayudarte en cualquier eventualidad. Consulta nuestras coberturas.

Las lesiones más comunes en perros y gatos

Las lesiones más comunes en perros y gatos

Nuestros animales pueden padecer ciertas enfermedades comunes y, aunque les vigilemos, también pueden sufrir algunas lesiones. Normalmente, suelen producirse durante los paseos o en momentos de descuido, pero no debemos preocuparnos: Es completamente normal que nuestra mascota sufra pequeños percances. Os contamos cuáles son las lesiones más comunes en perros y gatos y qué podemos hacer para evitarlas.

Las lesiones más comunes en perros y gatos

Sin duda, nuestra mejor arma contra las lesiones de nuestra mascota es la prevención, pero manejar información nos mantiene preparados en caso de accidente. Estas son las casuísticas más comunes:

  • Ingestión de cuerpos extraños. El mayor peligro es el riesgo de asfixia, por lo que debemos estar muy atentos e intentar que nuestro perro o gato esté bien alimentado antes de salir a pasear. Los juguetes, por supuesto, deben ser de mayor tamaño que su boca, de forma que no pueda tragárselos.
  • Mordeduras de otros animales. En ocasiones, pueden verse envueltos en una pequeña pelea o sufrir las consecuencias de jugar con otra mascota. Siempre debes llevarlo al veterinario, pero puedes limpiar y desinfectar la herida.
  • Envenenamientos. Nuestros medicamentos pueden ser dañinos para nuestra mascota y los productos de limpieza son venenosos para ellos. También pueden serlo algunas plantas. Por todo ello, debes mantenerlos alejados de estas sustancias y, si detectas que tu mascota sufre vómitos u otros problemas, acude al veterinario.
  • Golpes o arañazos en los ojos. Es una zona muy vulnerable del cuerpo de nuestra mascota. Pueden darse golpes, arañarse al sufrir picores e intentar rascarse y un sinfín de problemas. Estate atento a la aparición de legañas excesivas, o lagrimeo. También puede aparecer hinchazón y parpadeo excesivo, y también pueden ponerse rojos.
  • Cojeras. Los motivos son diversos. Es una de las lesiones más comunes en perros y gatos, y puede derivar de que sufran roturas de ligamentos por alguna mala pisada, hernias e incluso pequeñas heridas en las almohadillas, o algo que se haya metido entre ellas y les produzca molestias al pisar. Además, suele estar ligado a dolor cuando le tocamos y a permanecer más quieto que de costumbre. Las causas son variadas, pero no tiene por qué significar un problema grave.
  • Uñas rotas. En sí mismas no suponen un problema serio, pero una uña rota puede provocar que se enreden o que se les enganche, produciendo una hemorragia que debemos contener. Para prevenirlas, es importante mantenerlas cuidadas, manteniendo la higiene y cortarlas con asiduidad.

En cualquier caso, si tu perro o gato sufre alguna de estas lesiones, debes acudir a tu veterinario de confianza. Por eso, para cubrir este tipo de accidentes y ayudarle cuando más te necesita, te recomendamos que le cubras con un buen seguro. ¡Tu mascota te lo agradecerá!