Ahorrar agua en casa es una de las cosas que nos suele preocupar respecto al ahorro, no solo en las facturas, sino como recurso en factores más amplios, como el medio ambiente. Hoy te contamos una serie de consejos para ahorrar agua en casa y solo usar la necesaria.
¿Cómo puedes ahorrar agua en el baño?
Cuando nos lavamos los dientes es importante cerrar el grifo mientras no necesitamos agua. Una buena forma de gastar solo la necesaria es llenar un vaso y luego enjuagarnos con ese agua. De esta forma el agua del grifo no estará corriendo todo el tiempo y desperdiciándose.
No uses el inodoro como si fuera una papelera. Tener un pequeño cubo de basura en el baño ayuda a evitar tirar papeles al inodoro cuando no tenemos ningún lugar a mano para desecharlos. De esta forma evitaremos tirar de la cadena más veces de las necesarias.
Tener un buen mantenimiento de la cisterna del inodoro evitará que esta tenga fugas. Asegúrate cada vez que tiras de la cisterna que esta vuelve a colocarse para que el depósito se llene y no se pierda agua.
Para la ducha podemos instalar una alcachofa con difusor, que hará que el agua salga de forma mucho más general, haciendo que la ducha sea más rápida.
Por supuesto, evitar baños y sustituirlos por duchas. Actualmente la instalación de platos de ducha es una alternativa en reformas de los baños, por muchas razones.
¿Cómo puedes ahorrar agua en la cocina?
Los electrodomésticos lavavajillas suponen un ahorro de agua considerable en la tarea de fregar los platos. Plantéate tener uno si tienes espacio, ahorrarás tiempo y agua. Para esto lo mejor es esperar a que el lavavajillas esté completamente lleno y usar un programa de economizar agua.
Si friegas los platos a mano, enjabónalos primero y después abre el grifo para aclararlos todos a la vez.
Si necesitas limpiar frutas y verduras, llena un recipiente de agua y acláralas ahí, en vez de dejar el agua del grifo correr. Ese agua sobrante te puede servir para regar las plantas.
¿Cómo ahorrar agua en otros lugares?
Respecto a las plantas, puedes reutilizar el agua que te comentábamos anteriormente, recogiéndola en botellas para cuando necesites regar.
Si tienes un jardín o una terraza donde da el sol, intenta regar las plantas al final del día, así evitarás que el sol evapore el agua y estas necesitarán menos cantidad.
Estate atento a cualquier fuga de agua en tuberías o electrodomésticos. Estas fugas, aunque sean gotas de agua presentes en el suelo de forma puntual, pueden suponer una pérdida de litros sin darnos cuenta.
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